Anátido distintivo con una distribución discontinua entre El Caribe y el sur de Sudamérica con tres subespecies reconocidas, encontrándose solo rubrirostris en Chile. En el país es una especie habitual pero poco abundante, que puede observarse regularmente desde la región de Arica y Parinacota hasta la región de Los Lagos, y escasamente en Magallanes. Prefiere lagunas de agua dulce o salobre, desembocaduras de ríos y embalses. Su plumaje es mayormente parduzco, con espejuelos verdes brillantes en las alas y cola larga de color crema. Destacan sus mejillas y su garganta blanquecinas y pico azulado de base rojiza. Se alimenta filtrando semillas, plantas acuáticas y pequeños invertebrados. Al comienzo de la temporada reproductiva, el macho exhibe llamativos despliegues nupciales, levantando su cuerpo verticalmente acompañado de suaves silbidos. Construye un nido protegido entre la vegetación densa y la hembra incuba, mientras el macho vigila el entorno.